Los socialistas reclaman que en muchos pueblos, en cambio, se estén apagando puntos de luz con la falta de recursos públicos como excusa.

El portavoz del PSdeG-PSOE en el Concello de Rairiz de Veiga, Pablo Lorenzo, denuncia que se dejen casi a oscuras los pueblos del ayuntamiento para poder afrontar el pago de las facturas de electricidad de la residencia de ancianos, de las que alguna de ellas se acerca a los 2.000 euros.

Según recuerdan los socialistas, la residencia de la tercera edad de Rairiz pertenecía al Consorcio Galego de Benestar y fue privatizada por decisión del actual regidor, Xosé Xaquín Rodriguez Ambrosio, alegando el elevado coste que le suponía mantenerla en el Consorcio Galego de Benestar. “Resulta sorprendente que se alegue un elevado coste cuando el Concello gasta en personal cerca de 600.000 euros, lo que supone el 60% del presupuesto”, reclaman desde el PSOE. “Rairiz cuenta con un presupuesto aproximado de 1.000.000 de euros y es el único concello de la provincia y probablemente de Galicia que lleva dos años con inversión real del 0%”, insisten.

Lorenzo recuerda, además, que Rairiz cuenta con una población muy dispersa y envejecida y en los últimos años está viendo como se dificulta cada vez más el acceso a los servicios básicos de los que antes se disponía en el municipio. “Mientras se apagan puntos de luz del alumbrado público, con la excusa del elevado coste que supone mantenerlo, se están pagando los gastos eléctricos que genera una empresa privada”, lamenta.

El grupo socialista criticó en su momento esta privatización dado que las pensiones en Rairiz son pocas las que superan los 700 euros mensuales. En un centro público se le cobraría entorno al 75% de la pensión dejando lo restante para gastos corrientes de la persona. “Con esta privatización vemos como matrimonios de ancianos tienen que juntar las dos pensiones para poder internar solo a uno de los conyugues, ya que los costes van desde los 900 pudiendo hasta los 1.500 euros en algún caso”, explica.

Así mismo, los socialistas destacan que la residencia fue adjudicada a una empresa cuyo administrador es el actual teniente de alcalde de A Merca, José Manuel Garrido, del Partido Popular, grupo político al que pertenecía Rodríguez Ambrosio. Y que a continuación fueron contratadas para trabajar en la misma “la compañera sentimental del alcalde y la esposa de un concejal del grupo de gobierno”. Por lo que piensa que con esta privatización “las únicas personas que se vieron beneficiadas fueron ellas dos que consiguieron trabajo, todos los demás hemos perdido un servicio público.