Se invertirán más de dos millones de euros para recuperar la calidad medioambiental del río Limia a su paso por esta comarca. Las acciones se desarrollarán durante los próximos tres años.

 

El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, a través de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil, invertirá dos millones de euros en la puesta en marcha del proyecto LIFE Regenera Limia, que nace con el objetivo de recuperar la calidad medioambiental del río Limia a su paso por esta comarca mediante más de una veintena de actuaciones.

Este proyecto pretende aplicar un conjunto de medidas preventivas y de regeneración para reducir los nutrientes de origen ganadero en las masas de agua de la cuenca del río Limia, con el fin de cumplir con los objetivos medioambientales que establece la Directiva Marco del Agua y la normativa de transposición a la legislación española.

Acciones concretas

En concreto, se han presentado un conjunto de 26 acciones, divididas en cuatro grandes bloques de actuación, entre las que destaca el desarrollo de soluciones alternativas para la gestión de los residuos ganaderos destinadas a reducir su impacto en el medio ambiente. Al mismo tiempo, se contempla la creación y puesta en marcha de un Sistema de Control Integrado de gestión de fertilizantes y abonos en suelos agrarios que permita un empleo más eficiente de estos, reduciendo los aportes difusos de nutrientes a las aguas.

Está previsto también la reconversión de las antiguas explotaciones mineras de extracción de arena en el Canal de Antela en un sistema lagunar de charcas que potencien la capacidad de depuración natural del curso fluvial y que contribuya a la recuperación de espacios húmedos en la ZEPA de A Limia.

También se llevará a cabo la recuperación ambiental de los cauces fluviales modificados y la regeneración y reconexión de sistemas lagunares para reducir la presencia de nutrientes en el agua y la eutrofización, a la vez que se recuperarán los ecosistemas locales.

Se espera que una vez que finalice el proyecto, que tendrá una duración de tres años, se haya reducido no solo la concentración de nutrientes en el agua, sino también en un 30% el uso de fertilizantes, en un 50% el de abonos y que haya un 40% menos de gases de efecto invernadero.

Para ello, el programa contempla también acciones de formación e información a los sectores de más afectados.